Cómo circular en la ciudad
Tu bicicleta es tu vehículo
La bicicleta es un modo de transporte eficaz con el cual es posible alcanzar velocidades similares a la de los autos en la ciudad, por lo tanto es muy importante conducirla con el mismo cuidado con el que se conduce cualquier otro vehículo.
Los puntos que la hacen un medio eficaz son las ventajas que ofrece en el entorno urbano, como por ejemplo la circulación fluida en vías congestionadas y la facilidad para estacionar, que te permiten ganar tiempo y comodidad.
La calle es el espacio que todos los ciudadanos compartimos, por lo tanto la cooperación de todos los usuarios es fundamental para que la convivencia pueda ser llevada a cabo en forma tranquila y organizada. Para lograrlo tené en cuenta las siguientes consideraciones:
Confianza y seguridad
Recordá que tenés el mismo derecho de usar la calle que cualquier otro conductor.
Mostrar confianza y seguridad es casi tan importante como la precaución en la calle.
Titubear continuamente cuando se tiene el derecho de paso te hace perder tiempo, dificulta la prevención y resulta inseguro.
Sos responsable de tu seguridad
Debés estar atento y preparado para ajustar tu trayectoria y velocidad rápidamente cuando la situación lo exija.
Sé amable
Como ciclista, sos más vulnerable que otros vehículos: pensá que la cortesía es fundamental para tu seguridad; cuando puedas evitá los conflictos.
Da las “gracias” o asentí con la cabeza cuando te den el paso, o cedé el paso con un ademán.
En la calle todos somos iguales
Siempre adoptá una actitud de alguien que tiene el mismo derecho de circular en la calle que los otros usuarios. Ejercé tus derechos sin ponerte en riesgo y respetá los derechos de los demás.
Circulá en el sentido del tránsito
Circulá en el sentido correspondiente a la calle por la cual te desplazás, no podés circular en contramano por ninguna calle de la ciudad, ni aún cuando el trayecto en contramano sea corto.
Evitá exponerte a riesgos y exponer a otras personas en situaciones peligrosas:
- Ni automovilistas, ni peatones esperan encontrarse un ciclista en sentido contrario.
- El conductor de un auto puede ver venir al ciclista al doble de su velocidad cuando circula en sentido contrario, por lo que el tiempo que tiene para reaccionar se reduce a la mitad.
Separate de los autos estacionados
Se recomienda transitar a una distancia de entre 1 m – 1,5 m de las puertas de los autos estacionados para tener un margen de maniobra razonable para afrontar eventualidades, como chocar con una puerta abierta lo cual puede producir accidentes graves.
No circules rápido junto a la zona de las puertas de los autos
Recordá que como vehículo lento tenés derecho a ocupar el carril derecho. Circular muy cerca de los autos estacionados provoca que los automovilistas te visualicen como un obstáculo en su carril, más que como un vehículo con el que comparten la calzada.
Conducí en línea recta
Debés mantener una trayectoria predecible en todo momento. Si es necesario podés ayudarte con señas. En caso en que alguna situación te exija que ajustes tu posición y dirección, los movimientos tienen que ser lo más suaves posible, de forma que el resto del tránsito pueda prever tus movimientos y ajusten a su vez los propios.
Evitá ocupar los huecos entre los autos estacionados y evitá circular por las veredas.
Elegí tu carril de acuerdo a tu velocidad
En la ciudad las calles se dividen en carriles rápidos y lentos ubicándose los primeros a la izquierda y los segundos a la derecha. Estos últimos son los adecuados para la circulación de los ciclistas.
Pasá sólo por la izquierda
Cada vez que necesites pasar un vehículo siempre debés hacerlo por la izquierda, nunca por la derecha. Ni los conductores de otros vehículos ni los usuarios del transporte colectivo están preparados para prever que vos pases por la derecha.
Respetá las prioridades de paso
Existe entre los diferentes usuarios de la calle grados de prioridad que se deben respetar. El usuario de mayor prioridad es el peatón y luego le sigue en forma decreciente los ciclistas, transporte público y los autos.
El peatón tendrá prioridad al paso siempre y cuando este cruce por las esquinas utilizando la senda peatonal haya o no semáforo. En caso de que exista un semáforo o se encuentre un agente de tránsito el peatón deberá respetar las indicaciones de estos.
Como ciclista, tenás preferencia de paso en intersecciones cuando:
- Un semáforo así te lo indique.
- Circulás en una vía primaria o de mayor tamaño.
- En calles de un mismo ancho, circules por la calle de la derecha.
Hacete visible y observá
El uso de luces rojas traseras y blancas delanteras son fundamentales, como así también son recomendable el uso de accesorios reflectivos.
Así como es importantes que los demás te vean también es importante que observés tu entorno y en base a eso ajustar tus movimientos.
¿Qué observar?:
- Suelo: para prevenir pozos, vidrios o cualquier otro obstáculo.
- Intersecciones: vehículos girando hacia vos.
- Vehículos estacionados: prestar atención si los vehículos estacionados pueden volver a incorporarse al tránsito.
- Transporte público: que se encuentre deteniéndose, pasando otros vehículos o cerrándose.
- Actividades de carga o descarga.
- Peatones: que se encuentren en la vereda que puedan cruzar inesperadamente.
Ver para atrás se vuelve importante en ciertos casos, sobre todo cuando se quiere cambiar la posición lateral para cambiar de carril, girar o corregir o mejorar tu ubicación. Siempre que veas para atrás toma el manubrio fuertemente y mira lo más rápido posible. Muchas veces voltear la cabeza se puede interpretar como una seña de cambio de posición para quienes vienen detrás de tuyo.
Escuchá y hacete escuchar
Prestá atención a todos los ruidos de tu entorno estos te pueden dar información del movimiento del tránsito y del comportamiento del resto de los conductores.
Hacete escuchar, sobre todo cuando:
- Un conductor esté a punto de hacer una maniobra complicada sin notar tu presencia.
- Peatones crucen la calle de manera incorrecta.
- Un conductor pretenda cambiarse a tu carril sin haber notado tu presencia.
Esto lo podes hacer mediante tu voz, chiflidos, timbres, etc.
Posiciones en el carril
Posición primaria
La posición primaria se da en la zona del centro del carril o entre el centro del carril y la zona por donde pasa la llanta derecha de los autos. En esta posición te encontrás dentro de la zona de máxima atención de los automovilistas y tenés mejor visibilidad al frente. Esto significa que es la zona de mayor seguridad para vos.
Cuando te encuentres detrás de cualquier vehículo grande (ej. auto, camión, colectivo) es importante que mantengas una distancia de por lo menos de tres metros, esto te garantiza una buena visibilidad y evitá posibles colisiones con la parte trasera de estos.
Posición secundaria
La posición secundaria se encuentra en el límite del carril, compartiéndolo con otro vehículo. Se llega a esta posición cuando no podés alcanzar la velocidad del resto de los vehículos o cuando el carril es lo suficientemente ancho como para compartirlo con otro vehículo.
En esta posición es importante mantener una distancia de no menos de medio metro de la vereda y de un metro y medio de los autos estacionados.
Cambio de carril
Cambiá de carril en 3 pasos:
- Antes de de cambiar de cambiar de carril, date vuelta y analizá la situación del tránsito (tu velocidad, la de los vehículos que se encuentran detrás tuyo y de los que se encuentran en los carriles de tu costado).
- Preparate para el cambio al carril contiguo, ajustando tu velocidad y hacé evidente tu intención señalando tu cambio con el brazo correspondiente al lado del cambio.
- Cuando hagas el cambio, hacelo de manera suave y no en forma repentina. En caso de que quieras pasar un obstáculo, separate de este por lo menos a un metro y medio y ubicate en la posición primaria en el nuevo carril si no hay espacio suficiente para circular junto a los autos.
Siempre todos tus movimientos, incluidos estos, deben ser seguros, sin titubeos para no confundir al resto de los conductores.
Cruces
Antes de efectuar el cruce de una intersección es importante que observes cuidadosamente el espacio que está frente tuyo y te anticipes a posibles movimientos como personas o animales que estén apunto de cruzar y vehículos que circulen por la calle perpendicular a la tuya en dirección recta o doblando.
No dudes en las intersecciones, esto puede generar confusión y situaciones de riesgo.
También es fundamental que te posiciones correctamente.
Posición cerca de las intersecciones o en las intersecciones
- Llegando a una intersección mirá siempre al frente con las dos manos en el manubrio, preparadas para apretar los frenos.
- Si te das cuenta que tomaste una calle equivocada, no corrijas tu dirección o no te detengas repentinamente, continúa de frente hasta que tengas la oportunidad de tomar una calle que te permita redireccionar tu camino.
- Ubicate en la posición primaria para conseguir la mayor visibilidad, si es posible.
- No te coloques pegado a la vereda, esto puede favorecer a otros conductores a encerrarte.
En las intersecciones con arterias que tienen mayor velocidad de circulación permitida siempre tiene prioridad de paso los vehículos que circulan por ella. En la intersección de calles la prioridad de paso la tienen los vehículos que circulan por la calle que se encuentra a tu derecha.
En los semáforos
Recordá no detenerte sobre las sendas peatonales, este espacio debe ser utilizado por los peatones para que puedan cruzar de manera segura.
Elegí el lugar donde te pares a esperar el cambio de luz en función de la dirección que vas a tomar y de la posición de los demás vehículos.
4 problemas comunes en los cruces
- Autos dando vuelta a la derecha: antes de llegar a la intersección posicionate adecuadamente para evitar que te pasen conductores que quieran dar vuelta a la derecha.
- Peatones que se adelantan: con frecuencia los peatones arrancan un poco antes de que la señal cambie a siga. Esquivalos y en su caso cedeles el paso, aun cuando tengas la prioridad.
- Vehículos pasándose el alto: revisá que ningún coche en las calles transversales se pase la señal de alto.
- Vehículos dando vuelta a la izquierda: en calles de doble sentido debés prever que los automovilistas pueden dar la vuelta a la izquierda hacia tu trayectoria.
Rotondas
Evitá siempre circular en el borde de la calle pegado al cordón, no importa qué salida vayas a tomar. Hacelo siguiendo la dinámica del carril, y no te apartes del flujo: tendrás más visibilidad y evitarás conflictos con coches dando vuelta a la derecha. Siempre ocupá la posición primaria del carril desde antes de la entrada a la rotonda, de forma que en el momento de dar vuelta no te encierren.
Siempre debés incorporarte al flujo vehicular de manera que te coloques a la vista de los demás conductores.